Una vez más esta tarde te besé.
Volví a embriagarme de tu miel.
Volví a sentir tu seda piel.
Volví a nadar en tus ojos café…
Tímidamente en el reencuentro,
titubeamos sin saber.
Dijimos cosas al revés
y entre temblamos sin querer…
Mis manos fueron tomándote los dedos
que aceptaron lentos, pero a placer.
Con nervio, sudando, temblando tal vez,
queriendo sin quererlo, deseándolo a la vez
Por robar de un beso dulce de ese banco de tus labios,
flagrante, descubierto, en el acto tu me vez.
Capturando, aprisionando, con los tuyos, estos míos.
Tal castigo fue respuesta de los tuyos de una vez…
Con tu rostro entre mis tibias manos.
Con tus manos tocando mis cabellos.
Nuestros labios en unión, sutil gemido,
Sensaciones que regresan a la vida,
A la vida, vida viva que vivimos…