Esta mañana
hablando de cosas,
de tanto y nada,
concluimos:
La cosa es que no hay gran cosa,
¡que cosas!, ¿no?
La cosa no tiene caso,
pues, que siga la cosa,
Pero ¿que cosa es la vida?
¡gran cosa! ¡eh!
es esa cosa que no tiene caso,
pero es un caso
y si no le haces caso
es cuando fea se pone la cosa,
y en ese caso,
casi te quedas sin cosa ni caso.
¡Menuda cosa!
en todo caso,
como no hay caso,
decidimos seguir el café,
y acompañarlo con queso.
Pero Dios santo,
a mi amigo le dió por decir
¿quién se ha llevado mi queso.?
al final,
todo es un caso...